Una mujer de Kentucky, Estados Unidos, está enfrentado duras críticas en las redes sociales después de que fotografías suyas circularon en Twitter. En las imágenes, aparece posando orgullosa con una jirafa negra que cazó durante una visita a Sudáfrica el año pasado.
Un tuit del medio africano @Africlandpost rescató las imágenes donde la cazadora Tess Thompson Talley celebra el asesinato del animal. «Una salvaje mujer blanca, quien es parte neandertal, viene a África y dispara contra una rara especie de jirafa negra, cortesía de la estupidez de Sudáfrica«, se lee en el tuit, que ha sido compartido más de 41 mil veces y sigue creciendo.
La caza deportiva es legal en Sudáfrica, así como en Namibia, Zambia y Zimbabue, pero con frecuencia es condenada con dureza en las redes sociales. Está el caso de Walter Palmer, un dentista de Minnesota, Estados Unidos, quien en 2015 fue castigado socialmente por cazar a el león Cecil en Zimbabue.
El león Cecil era un viejo felino de 13 años que fue asesinado a tiros por Palmer en el Parque Nacional Hwange. Además de ser el emblema del lugar, Cecil era estudiado por la Universidad de Oxford para conocer el estado de salud de leones ancianos. Cuando la noticia de su muerte se hizo viral, las autoridades de Zimbabue detuvieron al cazador. Quisieron fincarle cargos criminales, pero tuvieron que dejarlo libre porque había pagado unos 40 mil dólares para cazar legalmente en el país.
La indignación que suelen levantar estos casos han llegado hasta la política. En 2015, los hijos del presidente Donald Trump, Donald Jr. y Eric, desataron el enojo de miles de personas cuando salieron a la luz distintas fotografías de ambos posando con elefantes y otros animales que cazaron años atrás.
En el caso de las fotografías de la jirafa cazada por Tess Thompson Talley, éstas fueron publicadas originalmente hace un año en su página personal de Facebook, reportó la cadena de noticias Fox News. Ella escribió: «¡Doy gracias a Dios porque mi sueño de toda la vida se hizo realidad hoy! Vi esta rara jirafa negra y la seguí por bastante tiempo. Sabía que era mía. Tenía más de 18 años, (pesaba) 4 mil libras y fue bendecida al poder darme 2 mil libras de carne para mi».
Ante la indignación que causó, la publicación original ya fue eliminada.
El Huff Post buscó a Tess Thompson Talley para hablar sobre las fotografías, pero no contestó. En cambio, respondió por correo electrónico a Fox News: «La jirafa que cacé fue una subespecie de jirafa en el sur de África. El número de estas subespecies están aumentando, en parte, gracias a esfuerzos de conservación que están pagados por cazadores deportivos profesionales. La raza no es rara en ningún sentido, salvo porque era muy vieja. Las jirafas oscurecen su piel a medida que envejecen».
El comediante Ricky Gervais respondió en un largo texto: «Estoy harto de que los cazadores quieran excusar su patético deporte diciendo que están promoviendo un servicio a la naturaleza. En realidad, están explotando las necesidades de los pobres. Los cazadores pagan enormes cantidades de dinero para disparar a animales magníficos porque las autoridades de esos países necesitan efectivo y entonces los cazadores dicen que ellos están haciendo un bien. No lo es».
Otras personas han salido en defensa de la cazadora, como el usuario de Twitter @Rwmcbrayer: «Estoy muy orgulloso de ti y tu esfuerzo en este debate. Debes ser elogiada por tu excelente elección de deporte y la calidad de tu caza. Siento mucho que personas sin inteligencia traten de avergonzarte por hacer lo correcto al matar a este precioso animal».