En la provincia nororiental de Jilin, fronteriza con Rusia y Corea del Norte, se han registrado al menos 30 casos en la última semana. La ciudad de Shulan ordenó retomar la cuarentena tras elevar de «medio» a «alto» el nivel de riesgo.
El rebrote de contagios de Covid-19 en el noreste de China obligó a que la ciudad de Shulan, en la provincia de Jilin, impusiera restricciones de movilidad a sus ciudadanos para evitar la propagación de la enfermedad. Las fronteras estarán cerradas, así como las escuelas y el transporte público.
La provincia de Jilin, que limita con Rusia y Corea del Norte y que tiene alrededor de cuatro millones de habitantes, se ha convertido en la fuente de una posible nueva ola de infecciones y por eso las autoridades de la ciudad de Shulan anunciaron la suspensión temporal de los servicios de trenes.
«La situación actual de Covid-19 es bastante compleja y grave, y existe un gran riesgo de que el virus se propague aún más», dijo Gai Dongping, vicealcalde de Jilin. Y agregó que «para detener la propagación de la epidemia, hemos decidido implementar medidas de control en el área urbana de Jilin».
Todos los cines, gimnasios cubiertos, cibercafés y otros lugares de entretenimiento debieron cerrar este miércoles, según información de Gobierno local.
El Gobierno chino, sin embargo, no teme por una nueva ola de transmisión a gran escala. Wu Zunyou, epidemiólogo jefe del Centro Chino para el Control y la Prevención de Enfermedades, dijo: «No creo que haya una segunda ola de Covid-19 en China. Hemos acumulado experiencia en frenar la propagación del coronavirus en los últimos tres meses».
Sin embargo, Song Shuli, una portavoz del Comité Nacional de Salud (NHC) advirtió que no debe ignorarse el riesgo de brotes causados por casos aislados y deben implementarse medidas de prevención y control para proteger al país contra un posible resurgimiento epidémico.
Nuevos contagios empujan al Gobierno a testear a 11 millones de residentes en Wuhan
De los seis casos nuevos registrados el miércoles en China, cinco provienen de la provincia de Jilin, según informó la comisión de salud local en un aviso este miércoles.
La aparición de nuevos casos en Wuhan en los últimos días, después de semanas sin nuevas infecciones, hizo que el Gobierno liderara una campaña para examinar a los 11 millones de residentes en la ciudad donde el coronavirus surgió por primera vez a fines del año pasado.
El Gobierno chino aseguró que intensificará aún más las medidas para protegerse contra el resurgimiento interno y los casos importados de Covid-19 para evitar un nuevo brote de la epidemia, pero solo Jilin tendrá restricciones por ahora.
Por FRANCE 24