*Este instrumento legal propone que los Estados que reciban la ayuda cubana sean incluidos en la lista anual de trata de personas de EE.UU.
Un grupo de senadores republicanos de EE.UU. introdujo un proyecto de ley para penalizar a los países que hayan contratado los servicios del personal médico cubano.
Los senadores Rick Scott, Ted Cruz y Marco Rubio presentaron el proyecto de ley titulado ‘Detener las ganancias del régimen cubano’, en el que se le pide al Departamento de Estado que publique la lista de países que tienen contrato con el programa de misiones médicas de Cuba y considere incluirlos en el reporte anual de Trata de Personas.
Este grupo de parlamentarios aduce que Cuba obtiene unos 7.000 millones de dólares anuales por prestar su servicios profesionales, incluidas las misiones médicas, y que ese «programa es una de las mayores fuentes de ingresos de la dictadura cubana, pero rara vez le pagan un salario digno a los profesionales de la salud».
Según la exposición de motivos presentada en la página personal de Scott, «Cuba utiliza la pandemia para explotar a sus propios profesionales de la salud con fines de lucro, mientras que la isla necesita desesperadamente medicinas, equipos médicos y profesionales de la salud».
¿Qué propone el proyecto
- Que el Departamento de Estado publique la lista de países que tienen contratos con el Gobierno de Cuba para su programa de misiones médicas.
- Requiere que los contratos sean considerados por el Departamento de Estado como un factor en la clasificación de ese país en el informe de Trata de Personas.
- Que la clasificación del país anfitrión no se vea afectada si le paga directamente a los médicos cubanos, si les permite que lleven a sus familiares y si Cuba no recibe ninguna compensación.
La cooperación médica internacional cubana ha sido frecuentemente atacada por Washington y por los gobiernos de Bolivia y Brasil, que los han expulsado de sus países. Según Díaz-Canel, el Gobierno de EE.UU. «miente y calumnia» sobre la labor de estos trabajadores de la salud, que se encuentran en una treintena de países para brindar atención en medio de la crisis por el coronavirus.
El pasado 10 de abril, el subsecretario de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado de EE.UU., Michael G. Kozak, aseveró que el Gobierno cubano incumplía con las convenciones internacionales de trabajo al «traficar» con los especialistas de la salud.