Luego de que se diera a conocer el hallazgo del cuerpo de un bebé de tres meses en la basura del penal de San Miguel, Puebla, la organización Reinserta indicó que el bebé «pudo haber sido usado para ingresar droga al penal».
En un comunicado publicado en redes, Reinserta “condenó enérgicamente” a las autoridades penitenciarias de Puebla por lo ocurrido a principios de esta semana.
La organización aseguró que “el bebé de tres meses fue asesinado al interior del penal cuando ingresó en una visita familiar”.
En el documento se menciona al gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, al Director del Centro, Jorge Gómez Torres y al Subsecretario de Centros Penitenciarios, Alfredo Vagas Quintanilla por su “incapacidad” de mantener el control en el penal.
Según el comunicado, un interno encontró el cuerpo del bebé cubierto con cal en un contenedor de basura; se reporta que tenía una herida en el abdomen.
Saskia Niño de Rivera, presidenta de Reinserta, comentó en una entrevista para Milenio que la incisión en el abdomen “hace pensar que ese niño fue usado para ingresar droga al penal”.
También descartó la posibilidad de que el bebé haya ingresado muerto al Centro Penitenciario.
Por último, Niño de Rivera enfatizó que se ha descuidado el tema familiar en las cárceles, donde el 83 por ciento de los internos -mujeres y hombres- son padres de menores de edad.
El comunicado también señala que existen varios actos de corrupción en el penal, como cobro de lista, ingreso de mujeres sexoservidoras, ingreso de droga y pelea de perros.
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