Los dos miembros de la marina de México que fueron secuestrados el mismo día de la detención de la esposa del líder del Cártel de Jalisco Nueva Generación aparecieron cuatro días después atados pero en buen estado de salud, informó el sábado la Secretaría de Marina (SEMAR).
Los dos elementos, un hombre y una mujer, fueron localizados el viernes por la noche en un barrio de Puerto Vallarta, en el Pacífico mexicano, por la policía municipal. Ambos estaban atados y el hombre presentaba “algunos golpes” mientras que la mujer estaba “intacta”, indicó una nota de prensa de la SEMAR.
Los marinos habían ido desde la ciudad de Puerto Vallarta a Zapopan, también en el estado de Jalisco, para participar en “una reunión ordinaria de grupos de coordinación” en temas de seguridad y fueron privados de su libertad el lunes cuando esperaban en un estacionamiento de un centro comercial a un compañero que había ido a realizar unas compras, según explicó en su momento la SEMAR en un mensaje a The Associated Press.
Ese mismo día, Rosalinda González Valencia, esposa de Nemesio Oseguera Cervantes, alias “El Mencho”, líder del Cartel Jalisco Nueva Generación, fue capturada en Zapopan en una operación en la que intervinieron el Ejército, la Fiscalía Federal y el Centro Nacional de Inteligencia.
Aunque en un primer momento la Secretaría de Marina desvinculó el secuestro a la captura de González Valencia, después no descartó que estuvieran vinculados y la fiscalía de Jalisco indicó que investigaba todas las hipótesis.
El secuestro provocó un operativo de diversos cuerpos de seguridad estatales y federales para dar con los marinos.
El estado de Jalisco es el feudo del Cartel Jalisco Nueva Generación. La captura de la esposa de su líder fue, según expertos y autoridades, un golpe importante a la estructura financiera y de lavado de dinero de esa organización criminal.
El grupo, con presencia en la gran mayoría del territorio mexicano, es uno de los más fuertes y peligrosos que actúan en el país y ha sido el cártel que más ha atentado de forma directa contra miembros de las fuerzas de seguridad.
Autoridades estadounidenses le señalaron por haber intentado comprar armamento de alto poder en ese país, como ametralladoras M-60. El poder de ese grupo es tal que hace algunos años, durante un enfrentamiento con las autoridades mexicanas, incluso derribó un helicóptero militar con un lanzagranadas.
Fuente INFOBAE