Una mujer de 89 años con una lesión en la cadera y con diabetes fue llevada a la institución en una ambulancia de la Cruz Roja de Reynosa
Una abuelita que tiene fractura de cadera, con diabetes y otras enfermedades, fue obligada por el personal de un banco de Banamex en Tamaulipas a acudir a sus ventanillas para ser atendida.
Directivos del banco negaron la atención a sus hijos y nietos que acudieron con una carta poder, para renovar su tarjeta bancaria con la que cobra su pensión.
Dolores Gómez Reyna, de 89 años, llegó a bordo de una ambulancia de la Cruz Roja a la sucursal de la institución financiera ubicada en el bulevar Morelos.
“La bajaron y llevaron hasta la sucursal en camilla, para realizar el trámite de reemplazo de su tarjeta con la que cobra su pensión de viudez y el programa de adulto mayor del gobierno federal”, informaron medios locales.
La abuelita era acompañada por sus familiares y bajo la supervisión de los paramédicos, ya que el personal del banco obligó a que acudiera presencialmente a realizar el trámite de renovación del plástico que se le venció desde hace seis meses.
Aún en las condiciones en que llegó, la abuelita tuvo que esperar afuera del banco por lo menos 20 minutos para que abrieran las puertas de la institución, manteniendo a doña Dolores bajo el inclemente sol.
«Mi abuelita ya no camina y su comida es a través de un biberón y duele mucho verla aquí en esas condiciones, afuera del banco y bajo el sol esperando que abran el banco para poder entrar», dijo Yulissa Plata, nieta de Doña Dolores.
Explicó que «queríamos que a través de poderes notariales uno de los hijos de mi abuelita pudiera hacer el trámite para que pudiera renovarse la tarjeta pero siempre que presentábamos los trámites, siempre había la petición de otros documentos y de esos ya pasaron seis meses».
Fuente https://nortedigital.mx/