Los habitantes del 90% del territorio norteamericano viven la peor tormenta invernal que ha cobrado más de 50 vidas de personas y centenas de animales.
Millones de personas buscan cobijo en medio de gélidas temperaturas, debido a una enorme tormenta que ha matado al menos a 50 personas en Estados Unidos.
El meteoro atrapó a algunas personas en casas con fuertes nevadas y dejó sin electricidad a cientos de miles de viviendas y negocios.
El tamaño de la tormenta prácticamente no tenía precedentes y se extendía desde los Grandes Lagos, cerca de Canadá, al Río Bravo, en la frontera con México.
En torno al 60% de la población estadounidense estaba bajo alguna clase de alerta o aviso meteorológico, y la temperatura se desplomó por debajo de lo normal desde el este de las Montañas Rocosas a los Apalaches, según el Servicio Nacional de Meteorología.
Se han cancelado más de 2,360 vuelos nacionales e internacionales, según el sitio web de monitoreo de vuelos FlightAware.
Los expertos señalaron que se había producido una ciclogénesis explosiva(ciclón bomba), en la que la presión atmosférica cae muy rápido en una tormenta fuerte, cerca de los Grandes Lagos, donde provocó ventiscas con nieve y vendavales.
La tormenta desató toda su furia en Buffalo, donde vientos con fuerza de huracán y una intensa nevada paralizaron los servicios de emergencia.
Fuente: CNN/CBS